miércoles, octubre 25, 2006

Sentado en la luna


Fecha interestelar: 25/10/2006. Hace ya un tiempo que está en la calle A Posteriori, el nuevo trabajo de Enigma, y como buen fan me veo en la obligación de volver a dedicarle unas líneas a Cretu. La evolución hacia un sonido aun más electrónico ya discernida en su anterior trabajo, se hace claramente patente en esta ocasión. Es este uno de sus discos más melancólicos e instrumentales, una banda sonora perfecta para un viaje estelar, a lo que ayuda bastante el uso de instrumentos náuticos, y ante todo, y según el artista, es un homenaje a visionarios y escrutadores del firmamento de todos los tiempos.

Doce temas componen el álbum, entre los que cabría destacar, de forma totalmente subjetiva, Sitting on the Moon y Dancing with Mephisto, y como curiosidad, el lavado de cara del tema Hello and Welcome incluido en el disco con respecto a la primera versión (Radio Edit) aparecida en formato single hace ya unos meses.

Más información sobre el disco y la posibilidad de disfrutar de fragmentos de todos los temas, así como links a otras páginas con más información sobre Enigma, en http://www.enigma.de

Fin de la transmisión.

miércoles, octubre 04, 2006

En los dominios de la Dietrich


Fecha interestelar: 04/10/2006. Y dentro de la serie de ciudades a visitar en mi diario, hoy le toca el turno a Berlín. ¿Por qué me gusta esta ciudad?

Porque está plagada de osos acechando en los lugares más inesperados con sus afiladas garras en alto (alguno de ellos incluso gay, como se puede observar en la foto).
Por los 360º de vistas desde la Fernsehturm.
Por sus trenes de dos pisos, cual autobuses británicos.
Por su Filmhaus, con su sala de los espejos y los vestidos de Marlene.
Por la cúpula del Reichstag y las vistas de la ciudad por la noche.
Por ese increíble y gigantesco parque que es Tiergarten.
Por lo divertido que es jugar al escondite en el Monumento al Holocausto.
Por esa hamburguesa de canguro que tuvo la educación de estarse quietecita, sin pegar ningún brinco, mientras la mordisqueábamos.
Por el Ampelmann de sus semáforos.
Por Potsdamer Platz y su Sony Center.
Por los timbres de las bicicletas pidiendo paso.
Por Berlin Hauptbahnhof, su nueva estación ferroviaria.
Porque a la tercera va la vencida, y la última habitación era la mejor.
Por el tranvía de Mondrian, arte callejero con campanilla de aviso a transeúntes.
Porque es una ciudad con un gran problema de graffiti. ¡Y es que el Muro creó escuela, señores!
Por los aviones, barcos y locomotoras del Deutsches Technikmuseum Berlin.
Por muchos otros pequeños detalles que, como siempre, se me quedan en el tintero.
Y por ser nuestro primer viaje.

Fin de la transmisión.